PRENSA y Manifiesto

Referencias a la manifestación en algunos medios:

leer "delaredulin" y ver video


leer "Orgullosos de la educación pública"

Manifiesto por la educación Pública
Asamblea de profesores del I.E.S Fuente Fresnedo de Laredo, 31 de mayo de 2012
Buenas tardes: los ciudadanos aquí reunidos –docentes, padres y alumnos- tenemos una preocupación común: la Educación Pública. Una Educación Pública que en los últimos tiempos se está viendo sometida a grandes presiones en detrimento de su calidad y de su legitimidad.
En primer lugar, unos recortes (disfrazados de “medidas”) cuyos efectos van a ser fulminantes ya en el próximo curso. Las declaraciones del Consejero de Educación de que “más alumnos por clase y menos profesores no afectan a la calidad de la enseñanza” son simplemente ridículos, atentando contra el más básico sentido común. Entre esos recortes, podemos mencionar los siguientes:

  • El aumento de los alumnos por aula en un 20%. Esto quiere decir que en Primaria el número de alumnos por clase puede llegar a 30, mientras que en Secundaria se podrá llegar hasta 36. Imaginemos ahora 30 niños o 36 adolescentes, todos juntos en un aula en la que en ocasiones ni caben: chavales con diferente conducta, diferente ritmo de aprendizaje, con distintos intereses y diferente situación familiar y social, algunos -cada vez más-, con un idioma materno que no es el español: ¿cómo atender a las necesidades de cada uno sin contar con apoyos, desdobles y clases especiales? 
  • El aumento de la jornada lectiva hasta 25 horas semanales en Primaria y 20 en Secundaria. Conviene recordar que los profesores, por contrato, trabajamos 37,5 horas semanales. Y la mayoría de los docentes dedican bastantes más horas que las mencionadas. No hay que olvidar que cada clase en el aula tiene un importante trabajo detrás. La queja del profesorado no es la queja de gente con "pocas ganas de trabajar"; es la queja de gente que quiere hacer bien su trabajo. 
  • La eliminación de puestos de trabajo en Educación: Si sumamos las dos “medidas” anteriores: más alumnos por clase y más horas por profesor, la cuenta sale clara: sobran profesores. El curso que viene cientos de personas que actualmente trabajan en la Enseñanza pública de Cantabria se quedarán sin empleo. 
  • La congelación de la implantación de los nuevos Ciclos Formativos de FP. 
  • La suspensión de la obligatoriedad de los centros de ofertar las dos modalidades de Bachillerato. Ello
    supondrá que muchos alumnos interesados en una de esas modalidades, al dejar de ofertarse en su centro más cercano, se verán obligados a mayores desplazamientos para poder cursar los estudios. 
  • La modificación de las sustituciones por bajas laborales: en la práctica no se sustituirá a los docentes enfermos. Ello implica que los alumnos de un profesor de baja perderán multitud de clases que no podrán recuperar posteriormente. 
Pero junto a estos recortes nos preocupa también un discurso cuya finalidad es deslegitimar la Educación Pública. Los docentes somos los primeros en reconocer que el sistema no es perfecto. Pero sigue teniendo una gran virtud: es el pilar de la equidad social. Sin una Educación Pública que atienda especialmente a aquellos alumnos que más lo necesitan, las desigualdades sociales se incrementarán aún más. Por todo ello exigimos,
  • en primer lugar, respeto por la comunidad educativa. No sólo por los profesores, también por los alumnos y sus familias. 
  • en segundo lugar, exigimos una financiación suficiente. La Educación Pública la pagamos entre todos, y a todos beneficia.
Es tarea de todos y cada uno de nosotros garantizar esa Educación Pública de calidad que queremos y necesitamos. 

  • Gracias a todos por acudir, y hasta pronto.